Me llamo Azucena Muñoz y soy adiestradora profesional y técnica en gestión emocional del comportamiento utilizando el método Cognitivo-Emocional.
He tenido una vida llena de animales, desde pavos reales, pasando por loros, tortugas, peces, y nunca faltaban l@s gat@s y perr@s en casa. Siempre me han dicho que tengo un don con los animales, que tengo talento natural para entenderlos y relacionarme con ellos.
La vida me ha enseñado que no basta con talento para ser de las mejores, que también requiere esfuerzo, dedicación, formación y pasión. Y como soy deportista, la competitividad fluye por mis venas y me empuja a querer ser de las mejores. Así que, hace unos años que decidí dar ese paso e ir más allá del talento. Por ello me formé como adiestradora, en varias academias, con diferentes profesionales, de los mejores de España, diferentes métodos, hasta hallar aquel que se asemejaba a mi ética moral y forma de entender a los animales. Es por eso que me acabé centrando en el método cognitivo-emocional. Un método que trabaja con las emociones de los animales y que les hace pensar, respetando al animal como ser vivo, teniendo en cuenta su estado emocional, como un miembro más de la familia, aunque algo diferente, porque tenemos que tener claro que no son personas. Son perr@s y tenemos que respetarlos y comunicarnos con ellos como tales.
He decidido dedicar mi vida a mi pasión, formarme para entender más, comprender más y llegar a lugares de la mente del perro que antes no llegaba. Ayudar a trazar un puente de comunicación entre las personas y l@s perr@s. Que no haga falta que haya un adiestrador o adiestradora constantemente para ayudarles a entenderse. Que sea el propio tutor o tutora el que acabe aprendiendo a entender a su perr@ y que su perr@ le entienda a él o a ella.
Mi objetivo es que tanto tutores y tutoras como perr@s sean felices juntos.
Yo soy Rocko, una mezcla de mezclas. Tengo algo de pastor belga, algo de pastor alemán y de pequeño decían que, de labrador, pero esa última parte no me parece muy acertado. Tengo 7 años y a pesar de mi juventud, me siento como un abuelo. Soy muy tranquilo y sociable. Pero, a veces, me gusta dejar claro que mando yo a otros perros. Se ha de notar mi parte de sangre de pastor alemán. Mi tutora dice que soy un Don Juan porque saludo a todas las chicas que me miran, pero yo creo que es que soy educado.
Me encanta salir a pasear, sobre todo si hay piedras grandes o palos que coger y transportar, y a veces escarbar. Me chifla aprender trucos nuevos con mi tutora, aunque a veces se pone muy pesada con no dejarme entrar en la cocina.
Soy un gran perro guardián, que avisa de los intrusos. Pero que no te asuste mi tamaño, soy un trocito de pan. ¿Hablando de comida, tienes algo para mí? ¡Me gusta todo menos la lechuga!
Yo soy Jazz, un infiltrado momentáneo. Era un futuro perro guía, que ha pasado todas las pruebas con sobresaliente. Gracias a todos los entrenadores y la compañía de Rocko, ¡Soy un estupendo perro Guía!
Muy sociable con todo lo que se mueva, juguetón como el que más, pero he aprendido a ser muy disciplinado cuando me lo piden. Me encanta hacer caso.
Siempre estoy muy atento para ser un perro ejemplar, pero no pierdo mi parte de perro simpático que te pide mimos y juega constantemente para alegarte el día. Vamos, un amor de perrito. 
